El ganado ovino conoció un fuerte desarrollo durante las últimas décadas del siglo XIX, estructurándose su crianza con la creación del Ministerio de Agricultura. Fue así como se inició la identificación de razas locales. (más…)
En 1934 J. de Yrizar decía ver “el origen del caserío en las modestas construcciones llamadas bordas, que aún se ven en algunos montes vascos. […] Y lo que es más importante, el espíritu constructor, el ingenio del casero combina todos estos elementos [piedra y troncos de roble y castaño]”. En 1981 J.M. de Barandiaran ampliaba este punto de vista señalando que “muchas de las casas rurales antiguas son trasunto de las chozas pastoriles”. Esto es tanto como decir que es ahí donde recae el peso del pastoreo y la prestación vecinal (auzolana), pues la mano —que no el conocimiento— del artesano ha llevado a cabo una labor excepcional en muchos de los asentamientos humanos provisionales o precarios como es el caso de las bordas. (más…)