La sangría fue un método científico ampliamente utilizado por la medicina oficial en tiempos pasados, pero con los años su uso quedó relegado al ámbito de la medicina popular.
Eran dos los procedimientos empleados: se abría una vena periférica, practicando un corte, a fin de que se produjera una hemorragia controlada, o bien se aplicaban sanguijuelas —conocidas mayormente como uzanak o izainak en euskera— que absorbían la sangre impura o sobrante. (más…)