En septiembre se oye, una y otra vez, la pregunta “¿dónde has pasado las vacaciones?”, y las sucesivas respuestas a la misma van creando una incómoda competición respecto de la originalidad de los lugares visitados. Con las envidiables imágenes obtenidas, constantemente intercambiadas y publicadas en las redes sociales, el recuerdo de las anécdotas, que dinamizan las conversaciones otoñales, y el moreno de la piel al regresar nuevamente a nuestro entorno, acreditamos a nuestros allegados que hemos disfrutado, y mucho, de las vacaciones. Y es que el disfrute del descanso vacacional está ligado, actualmente, y casi de forma obligada, a viajar, a la necesidad de salir del entorno habitual, de tal manera que, cuanto más lejano sea el destino y más singular sea la experiencia, mayor será nuestro goce.
Lekeitio (Bizkaia). Akaitze Kamiruaga. Archivo Fotográfico Labayru Fundazioa.
Es sabido que en la antigüedad distinguían el otium del negotium. La gente noble y de estatus elevado podía aplicarse al otium: disponía de tiempo libre para dedicarse a conversar, leer, escribir, labores artísticas… en tanto que los mercaderes y las personas empleadas en el comercio y otros menesteres similares se ocupaban en el negotium. Desde la época de los griegos y los romanos ha cambiado mucho la situación. (más…)