En nuestras investigaciones sobre patrimonio cultural más de una vez hemos prestado atención al deporte rural, pero en esta ocasión lo vamos a tratar desde el punto de vista de las mujeres, tanto desde su papel como competidoras, como también por su importancia en la transmisión.
Hoy en día nos parece normal ver mujeres compitiendo en pruebas de todo tipo de deporte rural, pero no hace muchos años eso era impensable. Algunas practicaban en casa, pero de forma íntima y silenciada, porque no estaba bien visto exhibirse en la plaza. ¿Cuándo se ha producido el cambio? ¿Qué lo ha impulsado? ¿Qué es lo que ha cambiado?
Para ver la evolución y el proceso vivido, estamos llevando a cabo grabaciones a mujeres deportistas para, a través de su testimonio, ver cuál es el estado de la cuestión. Algunas proceden de familias de deportistas y por lo tanto han recibido la transmisión en casa. Otras, en cambio, se han aficionado participando en equipos de uno y otro deporte.
Otra gran diferencia en la práctica del deporte rural hoy en día, tanto en hombres como en mujeres, es que no se entrenan en casa mientras hacen las tareas del caserío. Ahora todos acuden a gimnasios donde cuentan con la asesoría de entrenadores y especialistas, tanto para los ejercicios como para el régimen alimenticio. Y entre los más jóvenes, la mayoría practican crossfit; es más, algunos han llegado al deporte rural a través de esa disciplina deportiva.
Dentro de este proyecto, durante este año estamos haciendo grabaciones a las propias deportistas, así como exhibiciones y competiciones. A partir de ese material los próximos años iremos elaborando diversas publicaciones. Sin duda se trata de un tema muy interesante.